Día Mundial de las Jirafas
Jun 21

Día Mundial de las Jirafas

En todo el mundo, el día 21 de junio se celebra el Día Mundial de la Jirafa. Este majestuoso animal es una de las criaturas más queridas y emblemáticas de África, pero hoy en día se enfrenta a diversos desafíos que amenazan su supervivencia.

Caracterizado por su gran cuello y sus manchas únicas, la jirafa es el animal terrestre más alto del mundo. Sin embargo, debido a la expansión y crecimiento humano, la población de jirafas se ha visto disminuida drásticamente en las últimas décadas. Se estima que la población de jirafas ha disminuido en un 40% desde 1985, lo que la coloca en la categoría de especies vulnerables.

Las principales amenazas para la supervivencia de la jirafa incluyen la caza furtiva, la pérdida de hábitat y la fragmentación del hábitat debido a la expansión humana, así como cambios drásticos en la ecología del medio ambiente.

En muchas comunidades africanas, la jirafa se considera un símbolo de la naturaleza divina y de la sabiduría tradicional. Además su reconocimiento internacional ha llevado a varios programas de conservación y de recuperación de la especie. La gestión y protección de su hábitat es crucial para preservar la supervivencia de la especie y su papel como especie monitoreadora en la conservación de las sabanas africanas

El maltrato a jirafas en zoologicos argentinos: una realidad preocupante

Pocha y Guillermina

Recientemente, ha habido noticias sobre Pocha y Guillermina, dos jirafas que han vivido en el Zoológico de Mendoza durante mucho tiempo. Estas jirafas habían sido mantenidas en el zoológico, enfrentando situaciones de estrés e inadecuadas para su salud, como la falta de movimiento físico y la escasez de alimentos nutritivos.

Desde hace varios años, se había estado trabajando en un plan para relocalizar a Pocha y Guillermina en un santuario de vida silvestre en Sudáfrica, lo que podría ofrecer un futuro más saludable y sostenible para ambas jirafas.

Sin embargo, los planes se vieron frustrados después de que Pocha muriera inesperadamente en enero de 2021. Guillermina quedó sola en el zoológico y, aunque las autoridades del zoológico y defensores de los animales buscaron la relocalización de Guillermina luego de la muerte de Pocha, se hizo evidente que la decisión había venido demasiado tarde.

El caso de Pocha y Guillermina ha destacado la importancia de adoptar medidas concretas para proteger a las jirafas y otros animales en cautiverio, y buscar alternativas más éticas y sostenibles para su protección y cuidado. La situación de estas dos jirafas es desafortunada y trágica, pero debemos aprender de su experiencia para proteger a otros animales que actualmente se mantienen en zoológicos inadecuados.

Es hora de reevaluar nuestro manejo de los animales en cautiverio. Debemos esforzarnos por reducir el uso de zoológicos y promover programas de conservación éticos y sostenibles para mantener las poblaciones de jirafas saludables en la naturaleza. La liberación y reintroducción puede ser un camino difícil, pero es necesario apostar por iniciativas de protección de los hábitats naturales de las jirafas y su convivencia pacífica con los humanos, para proteger su futuro en nuestro planeta.

Ciro y Buddy

En Argentina quedan dos jirafas macho en el Ecoparque de Buenos Aires. Sin embargo, parecen destinadas a pasar lo que les queda de vida en el lugar. Y es que solo pueden viajar paradas y, vía terrestre, los puentes sobre las rutas son una amenaza inevitable.

También en el predio ubicado en Palermo quedan otros ejemplares exóticos, como es el caso de las dos jirafas, Buddy y Ciro (padre e hijo). Y en el caso de las jirafas, su vida parece estar destinada a transcurrir hasta el final en el Ecoparque de Buenos Aires.

El primer y principal motivo que desalienta cualquier posibilidad de traslado de las jirafas del Ecoparque porteño -las dos que quedan en Argentina- tiene que ver con que no existen reservas ni santuarios especializados en estos especímenes en la región.

Pero en el caso de las jirafas, no hay un santuario ni reserva en Brasil, por lo que cualquier traslado -en caso de pensarse- debería tener como destino un viaje aéreo o marítimo, que realmente tome varios días hasta el continente africano. Y es aquí donde entra en juego y en consideración una cuestión relacionada íntegramente a la anatomía y a la salud de las jirafas: su estatura. En caso de que se dispusiera de un santuario para jirafas,vía terrestre y en un camión que recorra las rutas. Y esto tiene que ver con el hecho de que los diferentes puentes que atraviesan las rutas no tienen la altura suficiente para que pueda pasar una jirafa por debajo, mientras que no hay chances de que una jirafa viaje de otra manera que no sea permaneciendo parada y erguida en su totalidad.

La altura promedio de una jirafa adulta es superior a los 4 metros (pueden llegar a 4,2 metros), mientras que -según la ruta y la zona donde se circule- los puentes que atraviesan las rutas no superan los 3,9 metros (en el caso de los más altos, la mayoría en Buenos Aires). Entonces no quedan dudas y se trata de lógica pura: las jirafas son más altas que los puentes viales y son animales que sí o sí deben viajar parados, por lo que no hay chance alguna de que puedan ser trasladados vía terrestre a algún hipotético santuario ubicado en el continente.

Es importante que todos nos tomemos un momento para reflexionar sobre la importancia de la jirafa como especie icónica y sobre las acciones necesarias para proteger su futuro. Debemos trabajar juntos para garantizar un futuro seguro y sostenible para la jirafa y otras especies que enfrentan amenazas similares.

El Día Mundial de la Jirafa es una oportunidad para aprender, reflexionar y actuar en nuestra responsabilidad individual y colectiva por la conservación de la biodiversidad y el equilibrio ecológico en nuestro planeta.

 

 

 

[Redacción: Josefina Real de Azua,Voluntaria El Paraíso de los Animales]